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Mónica nos cuenta cómo canalizó su experiencia personal y su formación profesional en su libro, y cómo ese viaje dio origen a «Los mensajes de Chloe».

Publicado en Sentado en la banca del parque

La escritora recuerda como canalizó su experiencia personal

Mónica Carrasco: «Nuestra historia parecía el relato de una película» 

Antonio Tomasio

En esta charla, Mónica nos cuenta cómo canalizó su experiencia personal y su formación profesional en su libro, y cómo ese viaje dio origen a «Los mensajes de Chloe».

¿Qué te motivó a escribir «Los mensajes de Chloe» y cómo fue el proceso de convertir una experiencia tan dolorosa en un libro?

Durante el proceso de duelo por la muerte de mi hija, Chloe, comencé a escribir cartas, notas y crónicas en mi blog. Y un día, a la vuelta de uno de esos momentos caóticos y duros, me senté y me propuse escribir un libro. En vez de escribir ficción, que en realidad era a lo que se asemejaba nuestra vivencia (de hecho nuestra historia parecía el relato de una película), lo que hice fue escribir nuestra historia, y las cosas que había vivido y sentido las volqué en la novela. El manuscrito me pareció una forma justa de honrar a Chloe. En el libro hablas sobre las fallas en el sistema de salud y judicial.

¿Qué crees que podría cambiar para proteger mejor a las víctimas de negligencias médicas?

Este propósito de cambio es muy complejo y fatigoso de enderezar. No digo que no se puedan cambiar algunas cosas, sino que es necesario concienciar acerca de la realidad de las negligencias médicas. Frente a la mala praxis médica, los hospitales y la Administración de Justicia suelen poner obstáculos y ralentizar el camino de las reclamaciones. Así, las víctimas se enfrentan con situaciones absurdas que solo consiguen ahondar en la frustración y en el sufrimiento. Los casos de mala praxis médica son complicados, porque la víctima lucha contra una fuerza, un poder innegable, que es la medicina y los médicos. Pero si el paciente y sus abogados preparan bien el caso, es posible obtener una resolución estimativa para el reconocimiento de los daños y perjuicios causados por la irresponsable conducta de los profesionales médicos.

¿Cómo afectó el proceso legal a tu vida personal y profesional? ¿Qué impacto tuvo en tu visión sobre la justicia?

Afectó negativamente a mi vida personal y profesional, pues me sentí desamparada y poco comprendida. Esa sensación de desolación extrema llegó a afectar incluso a mi visión sobre la Justicia. No estoy en absoluto menoscabando el valor de la Justicia, aunque tengo la convicción de que las acciones de algunos operadores jurídicos deslustran la imagen de imparcialidad y de equidad.

Además de la lucha legal, ¿qué herramientas o prácticas emocionales encontraste útiles para sobrellevar el duelo y la frustración?

Ciertamente, fue la escritura. Escribir es una profunda introspección hacia la caverna más oscura de nuestra conciencia. Yo escribía en el silencio y por el camino descubría partículas de consciencia. Era como encajar las piezas de un puzle, después volcaba en el papel lo que quedaba en la memoria y en el corazón, después de haber tenido el privilegio de amar a Chloe en esta vida.

¿Qué mensaje le darías a otras personas que están atravesando una situación similar de pérdida o injusticia en el sistema de salud?

Les diría que tengan mucha paciencia. Afrontar el propio injusto les asfixiará, y si luchan vehementemente, contra el sistema de salud, les aclaro que será extenuante. Tanto es así que llegará un momento en que necesitarán priorizar su propia salud. Es bastante duro, aunque no lo parezca. Es difícil hacer frente al ente de salud, pero aunque un combate sea desigual, también es posible vencer al poderoso. Tus libros infantiles como «Amélie sin miedo» y «Emma sin preocupaciones» están orientados a ayudar a los niños a gestionar emociones.

¿Cómo surgió la idea de crear estas historias?

Me pareció valioso compartir la escritura con mi hija, Nerea. Nuestro momento de escritura es mágico. Escribir historias de ficción nos lleva a ver la vida de una manera más divertida y con más ilusión. En tus libros para niños, abordas el miedo y el pensamiento positivo.

¿Qué otros temas emocionales consideras importantes para el desarrollo infantil?

En los libros infantiles abordamos el miedo y la preocupación. La serie ayuda a los niños a comprender las emociones de forma respetuosa y les acerca al mundo de las emociones, sentimientos y habilidades emocionales. Los libros incluyen mensajes positivos para gestionar el miedo y mejorar el bienestar emocional de los niños. Otros temas emocionales que me parecen importantes son la tristeza, la ansiedad, el estrés, etc.

¿Cómo ha influido tu formación como abogada en tu perspectiva sobre la empatía y la justicia en tus escritos?

Cuanto más he estudiado, leído y practicado derecho, más percibo el valor de los sentimientos y las emociones que planean en cada caso concreto. En el plano de la Justicia, la empatía es el valor más necesario y paradójicamente el que más está en crisis. El juzgador debe tener empatía con la víctima, ponerse en su situación para captar qué le ha ocurrido verdaderamente y qué derechos peligran. El juez debe entender que no se litiga por capricho y que el efecto del desamparo va más allá del propio injusto.

¿Crees que la victimización secundaria es un problema común en el sistema judicial? ¿Qué recomendarías a las víctimas para enfrentarlo?

Me gustaría pensar que no todas las víctimas del delito pasan por el mismo calvario judicial que nos tocó afrontar en el proceso judicial. Mi recomendación es que elijan un buen profesional, ya sea letrado o letrada, para que defienda sus intereses.

¿Cuáles son las mayores dificultades que has enfrentado como autora, tanto en términos personales como profesionales, al compartir tu historia en un libro?

En realidad, no me he enfrentado a ninguna dificultad al compartir mi historia en el libro. Ha tenido una buena acogida.

¿Qué importancia tienen para ti la familia y el hogar?

Para mí, el amor es el mejor refugio para los malos momentos. Cobijarse bajo el manto amoroso de la familia en el calor del hogar es de gran ayuda para superar una situación especialmente dolorosa.

¿Qué le dirías a quienes han vivido una situación similar, pero no se sienten con fuerzas para alzar su voz? ¿Cómo pueden comenzar a tomar medidas?

En cuanto sean conscientes de que están experimentando una injusticia, serán capaces de alzar la voz. La clave es ser consciente de la sinrazón. Pasado el momento inicial de shock, sentirán mucho enfado, al mismo tiempo que sentirán ira y rechazo por todo lo que choca con el sentido de justicia.

En la abogacía lo más importante es tener vocación y mostrar tenerla cuando se ejercita la profesión. Los letrados deben poseer la dedicación suficiente para trabajar por el bien de esa persona que ha confiado en ellos. Un letrado debe ser sincero con su cliente, cercano a él, para exponer de una forma clara y sincera la situación en la que se encuentra y las posibles salidas que tiene. Será necesario llegar a la línea de actuación común con el cliente, que ambos estén de acuerdo en la línea elegida, conociendo las ventajas y los inconvenientes. Y en la escritura recomiendo leer mucho, practicar mucho y no tener ninguna prisa en publicar.

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